Si me
preguntas
“… de tumbo en tumba,
entre pañales y sudarios…”
León Felipe
entre pañales y sudarios…”
León Felipe
Me dices:
La vida es grave
como un largo pasillo
de hospital público
habitado de restos
de sollozos
de suspiros olvidados...
la vida es un oscuro corredor
abandonado por dios.
Insistes: La vida es incómoda
como una habitación de huésped
poblada de las cosas que se han ido,
de hábitos secretos
de costumbres y fantasmas
intermitentes de la historia.
Te observo mientras hablas,
te escucho:
También a veces,
es el corazón de un pajarito
agitando latidos
para el próximo vuelo.
Y luego, no dices más,
bajas la mirada y callas.
Si me preguntas,
si fuese yo
quien deba responderte por la vida,
ahora que algunos cercanos ya están lejos
y otros comienzan a hablar de amor a nuestro lado,
podría volver sobre tus palabras
un trecho más
hasta acordar contigo
que la vida a veces
es el pajarito,
el corazoncito,
el huésped incómodo,
un reloj de arena
y el puñadito de tiempo
que se escurre
cuando la muerte
deja de esperarnos en la bruma
y con un pequeño gesto conocido
nos señala con un dedo.
La vida es grave
como un largo pasillo
de hospital público
habitado de restos
de sollozos
de suspiros olvidados...
la vida es un oscuro corredor
abandonado por dios.
Insistes: La vida es incómoda
como una habitación de huésped
poblada de las cosas que se han ido,
de hábitos secretos
de costumbres y fantasmas
intermitentes de la historia.
Te observo mientras hablas,
te escucho:
También a veces,
es el corazón de un pajarito
agitando latidos
para el próximo vuelo.
Y luego, no dices más,
bajas la mirada y callas.
Si me preguntas,
si fuese yo
quien deba responderte por la vida,
ahora que algunos cercanos ya están lejos
y otros comienzan a hablar de amor a nuestro lado,
podría volver sobre tus palabras
un trecho más
hasta acordar contigo
que la vida a veces
es el pajarito,
el corazoncito,
el huésped incómodo,
un reloj de arena
y el puñadito de tiempo
que se escurre
cuando la muerte
deja de esperarnos en la bruma
y con un pequeño gesto conocido
nos señala con un dedo.
(del libro Te busca y te nombra. Ed. Grupo Cero)
Hermoso... Gran remate.
ResponderEliminarPor cierto.. qué epígrafe... De lo lo mejor..
Buen día para ti.