jueves, 2 de julio de 2009

Deshabitada



En el golpe insepulto del viento,

oigo tu voz

saliendo del mar.
Soy una serpiente marina,

Eva brotando de la espuma de tu boca,

amante inequívoco.

Los días

corderos descarnados,

pasan en ráfagas de vida

que no llego a tocar.
Tengo el cuerpo

flotando en dos océanos,

soy un vaivén entrelo amado y lo perdido.


Un pez derrotado por el trueno,

el tajo en la escama.

Hay un instante eterno que honra a la ceniza.
Los espejos están desnudos,
estoy deshabitada
se ha ido la noche,
pero ninguna luz

me trae el alba.

3 comentarios:

  1. Hay un alba en cada nuevo viento que cruza el mar. Arrastra consigo las palabras que va recogiendo en el giro del día, en torno del planeta. Cuando llega el atardecer se derraman en el Tajo cenizas que van a cruzar el Atlántico, simientes de un nuevo día.

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  2. Bello. Cruzaron el Atlántico, gracias

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  3. Interesantísima tu forma de escribir.Saludos

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