Sesión No Velada: Dolores 2

Timbre

-Hola buen día…

-Hola Dolores, adelante…

-Preferiría que no me pregunte cómo estoy, porque le voy a tener que contestar mal… así en general, estoy mal con todo ni sé con cuántas cosas estoy mal, pero estoy mal…

-Ya lo dijo antes que le pregunte nada.

-Si, es verdad, pero es que si usted me pregunta me parece que le voy a tener que decir: bien, pero no estoy bien… puedo empezar a hablar, me siento explosiva.

-Por favor, no explote, hable nomás… yo la voy a interrumpir cuando me parezca oportuno.

-El miércoles cuando salí de aquí, lo llamé por teléfono y le dije: “Tuve una entrevista con una psicoanalista y voy a empezar a estar mejor en breve… quiero que me disculpes de lo que te hice…” él estaba en silencio primero, me escuchaba… ¿será que todavía le interesa lo que yo le diga?

-¿A usted qué le interesa?

-Que Damián me perdone…

-…. ¿Se quiere disculpar de lo que pasó?

-Si si, quiero que me disculpe… no sé qué me quiso decir… -Que se quiere disculpar de una culpa… como un mecanismo que parece que no cuestiona nada. Se culpa, después se disculpa. -Yo soy una boluda.

-No se disculpe.

-No me disculpo, al contrario, sé que soy una boluda con lo que hice.

-….Si usted cree que es una boluda, ¿¿qué culpa puede tener??’ está disculpada, usted es una boluda, entonces… no tuvo chance de actuar de otra manera…

-… No sé pensar de otra manera… si, puede ser que tuviera otras maneras para enfrentar las cosas pero no se me ocurre nada, cuando me siento celosa es como si tuviese un fuego en el pecho, en la cabeza… me lleno de odio…

-Si, puede seguir, no me incendie nada…

-¿Le parece que si me analizo no me va a pasar más lo de los celos?

-Usted tiene muchas preguntas que no llegó a cuestionar todavía.

-Yo sufro mucho con esto… Damián me dijo que le hice mucho daño… no me doy cuenta… yo soy la que sufro. Cuando sale con sus amigos, me vuelvo loca, pienso que está con otra chica, pero a mí me dice que estuvieron en la casa de x, o en el bar de la esquina de otro… bueno, me decía… ahora no quiere volver … me acordé de otra cosa… cuando yo estaba en el secundario tenía una amiga, Sol. Yo la amaba, estábamos juntas todo el tiempo, pero cuando cumplió 15 le hicieron una fiesta increíble, y puso en una mesa a las que consideró tus mejores amigas, y éramos 10… ¡!!!!! Casi me muero…

-Pensaba que iban a estar en esa mesa usted y ella solamente?

-No sé qué pensaba… pero me daba rabia pensar que éramos 10 mejores amigas, eso fue indiscriminado…. Yo la acompañaba a todos lados, estábamos siempre juntas… y a partir de esa fiesta yo me puse de novia con el hermano de ella, y a Sol no le di mas bola… ¡qué mala que soy a veces!.... cuando vi que ella tenía una nueva amiga, lo dejé a su hermano. El fue mi primer hombre…

-Quizás Sol fue su primera mujer

-¿¿¿Cómo???

-Eso… en sus celos aparece la relación con una mujer “Sol”, el que usted cree que fue su primer hombre… no tenía ni nombre… era el hermano de Sol.

-Es que Sol era todo para mí y creí que yo era todo para ella… esas cosas de la adolescencia… ahora no es así… con Damián me ponía celosa pero podía tener amigos… yo soy la novia… es distinto… tengo que tener el primer lugar…

-… es la novia, tiene el primer lugar…

-Bueno, era la novia, quería tener el primer lugar… me siento un poco avergonzada y no sé bien de qué… -… llegó sintiéndose mal indiscriminadamente… sin saber bien por qué, ahora está avergonzada y tampoco sabe porqué…. A lo mejor tiene que empezar a hablar de usted sin querer tener tan rápidamente conclusiones… sus “impulsos” como los llamó la entrevista pasada pueden transformarse en otra cosa… es cuestión de tiempo y de trabajo.

-Eso es lo que más me cuesta… -Tenemos que hablar de sus honorarios….

-glup.